OBSERVATORIOS ASTRONÓMICOS CIENTÍFICOS EN CHILE
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En las alturas:
(23 Septiembre, 2009 -
ESO - CA) El radiotelescopio, que pesa unas 100 toneladas y tiene un diámetro de 12 metros, fue llevado a las alturas desde el OSF, ubicado a 2.900 msnm, en un enorme camión llamado Otto.
Imagen: Primer radiotelescopio de ALMA es llevado a Chajnantor. Foto: ESO.
Las condiciones en el Sitio de Operaciones del Conjunto, en Chajnantor, aunque excelentes para astronomía, son muy duras para el ser humano. Sólo se dispone de la mitad del oxígeno que el existente a nivel del mar, lo que hace difícil trabajar allí. Es por esta razón que las radiotelescopios de ALMA se reciben y prueban a una altura menor, en el ALMA Operations Support Facility (OSF, Centro de Operaciones de ALMA), ubicado a 2.900 metros. Desde esta base, relativamente hospitalaria, el primer radiotelescopio ALMA empezó su viaje a las alturas de Chajnantor.
“Este es un momento importante para ALMA. Estamos muy felices de que el primer transporte de un radiotelescopio al sitio de gran altura haya resultado perfecto. Este logro sólo fue posible gracias a las contribuciones de todos los socios internacionales de ALMA: este radiotelescopio específico fue provisto por Japón, el transporte pesado por Europa, y los receptores electrónicos dentro de el radiotelescopio por Norteamérica, Europa y Asia”, dijo Wolfgang Wild, Project Manager de ALMA por parte de Europa.
El viaje empezó cuando Otto, uno de los dos camiones especiales de ALMA, subió el radiotelescopio sobre su carrocería con sus propios medios. Luego llevó su pesada carga por un camino de 28 km desde el Centro de Operaciones de ALMA hasta el Sitio de Operaciones del Conjunto. Si bien el camión especial es capaz de andar a velocidades de hasta 12 km/hora al llevar la radiotelescopio, este primer viaje se hizo más lentamente para asegurar que todo funcionara como lo esperado, lo que hizo que el viaje tomara unas siete horas.
Las radiotelescopios de ALMA utilizan tecnología de punta y son los más avanzados que se hayan fabricado para longitudes de onda submilimétricas. Están diseñados para operar completamente expuestos a las duras condiciones del Sitio de Operaciones del Conjunto. Esto significa sobrevivir a fuertes vientos y temperaturas que oscilan entre +20 y -20 grados centígrados, y al mismo tiempo ser capaces de apuntar con suficiente precisión como para distinguir una pelota de golf a una distancia de 15 km, y de conservar su lisa superficie reflectante con una precisión del orden de 25 micrómetros (menos que el grosor típico de un cabello humano).
"Transportar nuestro primer radiotelescopio al Llano de Chajnantor es una hazaña épica que ejemplifica los momentos emocionantes que ALMA está viviendo. Día tras día, nuestra colaboración global nos acerca al nacimiento del observatorio en la superficie más ambicioso del mundo", dijo Thijs de Graauw, director de ALMA.
Una vez que el camión Otto llegó al Llano de Chajnantor, llevó el radiotelescopio a una losa de concreto –una estación de acople con conexiones para energía y fibras ópticas– y lo posicionó con una precisión de unos pocos milímetros. El camión especial es guiado por un sistema de conducción láser y, tal como algunos automóviles de hoy, tiene también detectores ultrasónicos de colisión. Estos detectores refuerzan la seguridad de los modernos radiotelescopios a medida que el transporte los lleva a través del que pronto será un llano bastante poblado.
Cuando esté terminado, ALMA tendrá al menos 66 radiotelescopios distribuidos en alrededor de 200 bases, desplegadas en distancias de hasta 18,5 km y operando como un único telescopio gigante. Cuando ALMA esté totalmente operativo, los camiones especiales serán usados para trasladar los radiotelescopios entre las bases a fin de reconfigurar el conjunto para diferentes tipos de observaciones.
A este primer radiotelescopio de ALMA en el sitio de gran altura, pronto se le unirán otros, con lo que el equipo de ALMA se apronta a hacer sus primeras observaciones desde el Llano de Chajnantor. Se estima que tres radiotelescopios estarán conectados a comienzos de 2010 y que las primeras observaciones científicas de ALMA se harán en la segunda mitad de 2011.
Imagen: El primer radiotelescopio de ALMA llega a Chajnantor. Foto: ALMA.
ALMA ayudará a los astrónomos a responder importantes preguntas sobre nuestros orígenes cósmicos. Los radiotelescopios observarán el Universo en luz de microondas, en longitudes de onda milimétricas y submilimétricas, ubicadas entre la luz infrarroja y las ondas de radio en el espectro electromagnético. La luz a estas longitudes de onda proviene de algunos de los objetos más fríos pero también más distantes en el cosmos, como las frías nubes de gas y polvo donde están naciendo estrellas nuevas y también galaxias remotas ubicadas al borde del universo observable. El Universo está relativamente inexplorado a estas longitudes de onda, ya que los telescopios requieren condiciones atmosféricas extremadamente secas, como las de Chajnantor, además de avanzadas tecnologías de detección.
En un enorme camión llamado Otto, especialmente diseñado para mover los radiotelescopios, fue transportado desde el edificio base, ubicado a 3.000 metros de altura al al Array Operations Site, en el Llano de Chajnantor, a 5.000 metros de altura en el altiplano andino, cuyo aire extremadamente seco y enrarecido es ideal para las observaciones del universo que hará el ALMA.