LOS TRASBORDADORES PASAN A LA HISTORIA
(22 julio 2011 ESA / CA) Ya es historia. El transbordador espacial Atlantis partió de la Estación Espacial Internacional el pasado martes para regresar el jueves por última vez a la Tierra, dando por finalizada la era de los transbordadores. Comienza ahora un nuevo renacer de la NASA donde la frontera ya no es la órbita cercana de la Tierra, como fue hasta ahora, sino los viajes interplanetarios, el regreso a la Luna y luego a Marte.
Imagen: El Atlantis aterriza por última vez. NASA.
La misión STS-135, la última del Atlantis duró 12 días, 18 horas y 27 minutos, contando con la jornada extra necesaria para el traslado de carga entre el módulo de transporte Raffaello y la Estación Espacial Internacional - EEI.
Las ruedas principales del Atlantis tocaron la pista el jueves 21 de julio 2011, a las 11:56:58 CEST (09:56:58 GMT), en Florida.
Además de sus cuatro tripulantes, el vehículo espacial ha traído de vuelta una preciosa carga de muestras biomédicas.
La retirada de los transbordadores convierte a las naves rusas Soyuz, mucho más pequeñas, en el único vehículo actualmente disponible para llevar personal a la Estación. Para la subir carga se cuenta con las pequeñas naves rusas Progreso y los ATV europeos, que son sin embargo incapaces de regresar con carga de regreso a la superficie. En este momento la capacidad para traer objetos de vuelta a Tierra es muy limitada.
El Atlantis vuelve también con 2.5 toneladas de basura, equipos que ya no son necesarios y una bomba de amoniaco defectuosa.
El Atlantis, como el resto de los transbordadores de la flota, será donado a un museo estadounidense. En esta ocasión el viaje será corto, ya que el Atlantis se convertirá en una de las principales atracciones del complejo para visitantes del Centro Espacial Kennedy.
“Este ha sido el último vuelo de este fantástico vehículo, capaz de transportar más de 20 toneladas al espacio y volver”, ha dicho Thomas Reiter, Director de Vuelos Tripulados y Operaciones de la ESA y uno de los 24 astronautas europeos que han volado en un transbordador.
“Es triste, pero tenemos que mirar al futuro, a los nuevos acontecimientos que nos esperan. Seguiremos operando la Estación en los próximos años recurriendo en las naves rusas Soyuz para el transporte de astronautas, y los nuevos sistemas de transporte no tardarán en llegar”.
La puerta queda ahora abierta a la nueva generación de vehículos espaciales. Que estamos seguros no se parecerán en nada a los trasbordadores y mucho a las antiguas naves de la época de la misión Apolo a la Luna.
(19 Julio, 2011 NASA/Spaceflightnow) El trasbordador Atlantis se separó de la Estación Espacial Internacional (EEI) por última vez esta madrugada a las 02:28 a.m. EDT (GMT-4) con el piloto Douglas "Chunky" Hurley en los controles mientras el resto de la tripulación observaba emocionada. Navegaban en ese momento en la oscuridad orbital a 396 kilómetros de altura sobre el Océano Pacífico al este de Christchurch, Nueva Zelanda.
Imagen: El Atlantis se aleja de la EEI. NASA.
Luego que el Comandante Christopher Ferguson del Atlantis radió "Physical separation, Houston," el ingeniero de vuelo de la estación Ronald Garan hizo sonar la campana de la nave en el módulo Harmony, diciendo "Atlantis, deja la la Estación Espacial Internacional por última vez".
"Gracias por las 12 misiones de atraque a la EEI y por las 37 misiones de los trasbordadores para construir este increible laboratorio orbital", agregó, para luego continuer: "Los echaremos de menos amigos. Buena suerte, soft landing y nos veremos en la Tierra en el otoño".
Ver el video de la NASA de la separación.
(18 Julio, 2011 NASA/La Tercera) Los astronautas en órbita desacoplaron el gigantesco depósito Raffaello ahora lleno de basura de la Estación Espacial Internacional (EEI) y lo transfirieron al Atlantis, una de las últimas tareas antes del retorno del transbordador a Tierra el próximo jueves 21 de julio.
Los tripulantes usaron un pesado brazo robótico para mover el depósito, del tamaño de un autobús, repleto de casi tres toneladas de espuma de empacar y otros desechos de la estación. Fue la última tarea que compartieron los tripulantes del transbordador y de la base orbital, unos 10 astronautas en total.
Pronto cerrarán las escotillas entre las dos naves espaciales, antes de desacoplar ambas el martes. Los astronautas se alistaban para un emotivo despido, dado que el transbordador espacial nunca volará de nuevo.
Al director de vuelo, Kwatsi Alibaruho, le queda un turno más antes de despedirse para siempre del Control de la Misión de transbordadores en Houston. Dijo que las emociones de él y su equipo oscilan "entre un orgullo intenso por el buen desarrollo de esta misión, y a veces estar algo descontrolados, a falta de una palabra técnica (para describirlo)".
Cuando se acuerda de que todo terminará pronto, "me asusto un poco y me da una sensación nerviosa en el estómago que dura como cinco o 10 segundos, y luego vuelvo a interpretar el papel de un hombre de ojos de acero".
(11 de Julio, 2011 - NASA - CA) Mediante el brazo robótico de la Estación Espacial Internacional, los tripulantes del Atlantis sacaron de su bodega el módulo de carga Raffaello llevándolo al la escotilla del módulo Harmony, desde donde será descargado durante la semana. El módulo está cargado con 4,7 toneladas de abastecimientos, repuestos y equipos, incluyendo 1,3 toneladas de comida, que ayudarán a abastecer la estación durante el 2012.
(10 de Julio, 2011 - 21:00 horas - Chile - NASA - CA) El trasbordador espacial Atlantis atracó con la Estación Espacial Internacional a las 11:07 a.m. EDT del Domingo 10 de Julio, con una cuantiosa carga en sus bodegas. Luego del acoplamiento de las naves las escotillas se abrieron a las 12:47 p.m. y la tripulación del trasbordador entró a la EEI, para comenzar su estadía de una semana.
Imagen mapa: El Atlantis ya está acoplado a la Estación Espacial Internacional. Mapa BBC. Haga click aquí o sobre el mapa para ver la versión actualizada.
Imagen: Los tripulantes de la misión STS-135 son recibidos en la EEI por los tripulantes la Expedición 28 actualmente a cargo del puesto orbital. Todos parecen flotar dentro de la estación debido a que en realidad van
cayendo en caída libre alrededor de la Tierra. Crédito: NASA TV.
(10 Julio, 2011 10:00 horas NASA-CA) A las 8:29 a.m. EDT, el Comandante Chris Ferguson y su tripulación realizaron el último encendido de sus motores para acercarse a la Estación Espacial Internacional - EEI. Fueron activados por 12 segundos para acelerar la velocidad a los 26.676 kilómetros por hora y elevar la nave hasta 385 kilómetros de altura para el atraque del trasbordador con la estación a las 11:07 a.m. EDT.
Cuando el Atlantis se encuentre a 200 metros de la EEI, Ferguson rotará el Atlantis para que su vientre queda a la vista de la estación y sus tripulantes puedan fotografiar con cámaras de alta resolución el escudo térmico del Atlantis. Los ingenieros de vuelo de la EEI Sergei Volkov, Mike Fossum y Satoshi Furukawa utilizarán cámaras con lentes de 1.000 mm, 800 mm y 400 mm, respectivamente a través de las ventanas del Módulo de Servicio Zvezda. Las fotos serán trasmitidas al Mission Control en Houston para su análisis y evaluación sobre los posibles daños sufridos en el lanzamiento.
La reducida actual tripulación del Atlantis se debe a razones de seguridad, ya en caso de detectarse daños y que el Atlantis no pueda regresar a la superficie, sus tripulantes deberán refugiarse en la EEI y esperar a que sean rescatados con naves rusas Soyuz enviadas especialmente, rescate que demoraría aproximadamente un año, ya que estas naves con capacidad para tres tripulantes, podrían bajar de a un tripulante a la vez.
(9 Julio 2011) Preparándose para su atraque con la estación espacial, mañana domingo a las 11:07 a.m. EDT, la tripulación del Atlantis ha comenzado con la inspección del Sistema de Protección Térmica de la nave. Los especialistas están utilizando el brazo robótico de 50 pies del trasbordador, que premunido de cámaras de alta resolución les permite tomar imágenes cercanas de los protectores de Carbono Carbono Reforzado que las protegen de las altas temperaturas durante el reingreso.
LA TRIPULACIÓN SE PREPARA PARA EL LANZAMIENTO
(9 Julio 2011 NASA - CA) Momentos muy emotivos se viven en el espaciopuerto del Centro Espacial Kennedy, luego que los equipos encargados del lanzamiento de los trasbordadores comienzan a despedirse de sus trabajos. El equipo de cierre del trasbordador, que tienen a su cargo la misión de instalar a los tripulantes de las naves en sus asientos, realizaron un emocionante video para agradecer a su país el haberles dado la oportunidad de servir en un proyecto como el de los trasbordadores americanos. Ver video.
Imagen izquierda arriba:
El comandante Ferguson es ayudado a instalarse en su asiento por la tripulación de cierre.
Derecha:
El especialista Rex Walheim se instala en su asiento ayudado por la tripulación de cierre.
Imagen izquierda: La tripulación de cierre, que ayudaba a los tripulantes de los trasbordadores a subir e instalarse en sus asientos se despide luego de su último trabajo. Ver video.
EL ATLANTIS PARTE A LA ÓRBITA
(8 Julio 2011 NASA - CA) El trasbordador espacial Atlantis despegó esta mañana en la última misión del programa de trasbordadores. La misión STS-135, de 12 días de duración a la Estación Espacial Internacional lleva una tripulación de cuatro tripulantes y el módulo logístico multipropósito Raffaello con abastecimientos y repuestos para el puesto orbital.
Imagen arriba: El Atlantis es lanzado al espacio desde el Centro Espacial Kennedy, los difusores de agua emiten toneladas de vapor producida por los Hmotores cohetes de la nave. Foto NASA.
Imagen izquierda: Los tripulantes del vuelo STS-135 son: el Comandante Chris Ferguson, el Piloto Doug Hurley, y los Especialistas de Misión Sandy Magnus y Rex Walheim.
Los motores del Atlantis se activaron a las 15:29 GMT (11:29 a.m. EDT). La nave ingresó en órbita 8 minutos y 30 segundos después de su lanzamiento.
Luego del lanzamiento de la histórica plataforma 39A a las 11:29 a.m. EDT, la tripúlación comenzó los preparativos para el atraque con la estación, a las 11:06 a.m. del Domingo.
EL FIN DE LA ERA DE LOS TRASBORDADORES
(8 Julio 2011 - CA)
Nacieron como un medio para mantener la presencia de Estados Unidos en el espacio orbital. El cambio en el enfoque de la NASA hacia misiones interplanetarias y el fin de la construcción de la Estación Espacial Internacional, los hace innecesarios. Son muy caros, difíciles de mantener y peligrosos.
Su concepción fue producto del Grupo de Trabajo Espacial establecido por el Presidente Richard Nixon en 1969 para evaluar diseños y recomendar una estrategia nacional en el ámbito espacial. Desarrollando a la vez una estrategia común para la NASA, el Departamento de Defensa y los usuarios científicos y comerciales.
A principios de la década de los 70s, tras evaluar distintos conceptos frente a los costes de desarrollo y de operaciones, se elige un sistema basado en un orbitador pesado reutilizable con alas en delta, que llegaría a la órbita baja ayudado por dos cohetes de combustible sólido y con un tanque externo descartables. Esta solución es menos ambiciosa desde el punto de vista técnico que los primeros conceptos completamente reutilizables, pero presenta un menor coste de desarrollo.
El Presidente Nixon lanzó oficialmente el programa del Trasbordador Espacial en 1972.
La compañía North American Aviation (hoy en día Boeing Company) es seleccionada como contratista principal, lo que incluye el desarrollo de los orbitadores. El contratista para los cohetes de combustible sólido será Morton Thiokol (hoy en día Alliant Techsystems). El contrato del Tanque Externo es concedido a Martin Marietta (hoy en día Pratt & Whitney Rocketdyne).
Críticas
Desde el comienzo fueron detestados por los científicos espaciales, ya que su utilidad para experimentos es muy limitada y consumían ingentes recursos de la NASA para lo que eran sus verdaderos objetivos: explorar el Sistema Solar y la baja órbita terrestre (entre 350 y 400 kilómetros de altura) seguiría siendo el límite por decenios. Sin embargo los trasbordadores han sido la fuente de inspiración para las generaciones que crecieron bajo su presencia.
Los trasbordadores, fueron lo más cercano a las naves espaciales reutilizables de Flash Gordon y Brick Bradford, los héroes de las historietas de los años 1960s, que la humanidad ha creado, pero están muy lejos de servir para viajes espaciales interplanetarios.
Estados Unidos de América se la jugó completamente por estas grandes naves, del tamaño de un gran avión transcontinental, que consumieron a tal punto el presupuesto y la imaginación de la NASA que ni siquiera alcanzaron a pensar en algo que los reemplazara una vez que terminaran su servicio. O tal vez su fin llegó sorpresivamente y demasiado pronto.
Construidos para resistir un centenar de viajes al espacio, cada uno, con salidas semanales a la órbita, la realidad de su complejidad los hizo lentos y mucho más costosos de lo planeado. Cada vuelo cuesta unos 1.100 millones de dólares.
En los 30 años que van desde el 12 Abril 1981 al 20 de Julio 2011, los trasbordadores han realizado 135 vuelos, 4,5 vuelos al año en promedio. Su año más productivo fue 1985 con 9 vuelos en ese año, el exceso de confianza y la prisa abrió la puerta al desastre del Challenger, en 28 Enero 1986.
Se diseñaron como un cohete reutilizable multipropósito, un camión del espacio, que subió a la órbita a numerosos satélites y sondas interplanetarias, además de visitas para actualizaciones del telescopio espacial Hubble. En sus bodegas se instalaron laboratorios científicos espaciales que sirvieron por años para mantener la presencia americana en el espacio.
Finalmente encontraron una gran utilidad cuando se ideó la construcción de la Estación Espacial Internacional, a la cual comenzó a llevar partes y repuestos desde diciembre de 1998.
Finalmente se construyeron seis trasbordadores: uno para pruebas atmosféricas, el Enterprise, construido a fines de los 1970s para pruebas de vuelo y aterrizaje. De los cinco destinados a ir al espacio orbital, dos se destruyeron en sendos accidentes, el Challenger (28 Enero de 1986) y el Columbia (1 de Febrero, 2003). Dos ya completaron su servicio, el Discovery y el Endeavour y son preparados para ser exhibidos en museos, con lo que va quedando sólo el Atlantis, que el 8 de Julio emprendió el que parece ser su último vuelo.
EL ÚLTIMO VIAJE DEL DISCOVERY
Misiones del Trasbordador Espacial (ESA en español)
La historia de los trasbordadores (ESA en español)
UNA ERA ESPACIAL LLEGA A SU FIN
900 millones de euros cada misión. El horizonte de la futura exploración está en asteroides, la Luna y Marte.
(3 de Julio, 2011 El País - CA) Más de medio millón de personas calcula la NASA que se desplazarán el próximo día 8 hasta la zona costera, pantanosa y plana en la que solo sobresalen los edificios y las plataformas de lanzamiento de Cabo Cañaveral (Florida). Será la última oportunidad de presenciar un espectáculo tecnológico impresionante: el lanzamiento de un transbordador espacial. La partida del Atlantis está prevista para las 11.26 hora local (17.26 hora peninsular) y la mayoría del público se concentrará -como en las grandes ocasiones allí- en los alrededores del Centro Espacial Kennedy, para ver el ascenso de la mítica nave por el cielo, con sus cohetes echando fuego. Será el lanzamiento número 135 y el último de un transbordador. Cuando el Atlantis y sus cuatro astronautas regresen a la Tierra 12 días después, habrá acabado una era espacial que ha durado 30 años.
"Me gustaría aplazar la emoción hasta el momento en que paren las ruedas en la pista de aterrizaje [al volver]: creo que en ese momento nos llegará a todos la sensación del final", dice el comandante de esta última misión, Christopher Ferguson.
La decisión de terminar con los transbordadores se tomó en la NASA a raíz del accidente del Columbia, en 2003, dando un plazo para completar con estas naves la construcción en órbita de la Estación Espacial Internacional (ISS). Su enorme complejidad -un transbordador tiene más de dos millones y medio de piezas móviles-, su alto coste y su peligrosidad condicionaron la decisión. Pero todavía ahora se discute en la NASA sobre la oportunidad de dicha medida, sobre todo teniendo en cuenta que, a partir de ahora, y hasta que dentro de cinco años no estén listos los nuevos cohetes y cápsulas que está desarrollando la industria privada estadounidense para ir a la ISS, los astronautas de Estados Unidos tendrán que viajar como pasajeros de pago en las cápsulas rusas soyuz. Para algunos es casi un deshonor. Mientras tanto, la NASA, siguiendo el plan del presidente Obama, busca su nuevo horizonte en futuras exploraciones más ambiciosas: asteroides, la Luna y, antes o después, Marte.
"El gran legado del transbordador es que, aunque no ha logrado que los vuelos espaciales sean como pretendían sus diseñadores, sí los ha hecho mucho más accesibles que cualquier otro vehículo, ruso o americano, hasta la fecha y creo que merecen el justo respeto", dice Michael Griffin, anterior director de la NASA, el que tomó la decisión de cerrar el programa. Desde luego, nadie cuestiona que un transbordador es un monumento de ingeniería.
En el Atlantis irán esta vez solo cuatro astronautas, en lugar de los seis o siete habituales. Es una misión rara, y aplazada varias veces. No se contaba con que llegase a despegar a no ser que lo exigiera una emergencia en el vuelo anterior, que iba a ser el último, y tuviera que ir a rescatar a los astronautas refugiados en la ISS. Pero finalmente se aprobó financiación extra y se decidió hacer esta última misión de carga.
En la bodega del Atlantis van varias toneladas de suministros y repuestos para la estación y se traerán piezas sobrantes allí. Como en esta ocasión no queda ningún transbordador más en activo (el Discovery y el Endeavour se preparan ya para su exhibición en museos), para una emergencia se cuenta con las soyuz. Si en el lanzamiento se produjese algún desperfecto grave en el transbordador, los astronautas se refugiarían en la ISS y volverían en las naves rusas. En estas condiciones, mejor que sean solo cuatro: Ferguson, Doug Hurley, Sandra Magnus y Rex Walheim.
Pese al ambiente de desmantelamiento, la NASA sigue procedimientos normales para la última misión del Atlantis. "Todo el mundo hará su trabajo tan perfectamente como siempre", comenta Mike Leinbach, director de lanzamientos. "Pero sí, todos sabemos que se acerca el final; lo sabíamos desde hace tiempo, pero ahora quedan solo unas semanas, no años, y los ánimos son cada vez más sombríos".
En el momento en que aterrice el Atlantis de regreso y llegue la emoción final que dice Ferguson, quedarán atrás tres décadas de un programa espacial controvertido y se recordará a los 14 astronautas muertos en los accidentes del Challenger (1986) y del Columbia (2003).
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