Noticias de astronomía y del espacio. (Friso: Felipe Martínez.)

Telescopios Cursos Astroturismo Portada


Meade en Chile.

NOTICIAS DE ASTROFÍSICA GALÁCTICA IX

NOTICIAS:


Observadas con ALMA:

GALAXIAS PRIMITIVAS Y EVOLUCIONADAS

Las galaxias del Universo primitivo eran sorprendentemente maduras.

(30 Octubre, 2020 - NRAO/CA) Las galaxias masivas del Universo primitivo eran mucho más maduras de lo que se pensaba. Fue lo que reveló un equipo internacional de astrónomos que estudió 118 galaxias distantes con el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA).

Imagen: Dos galaxias del Universo primitivo observadas con ALMA en ondas de radio. Se consideran más maduras que otras galaxias primordiales porque contienen grandes cantidades de polvo (en amarillo). ALMA también reveló la presencia de gas (en rojo), a partir del cual se puede estudiar la formación de estrellas y los movimientos de las galaxias opacadas por el polvo. Créditos: B. Saxton NRAO/AUI/NSF, ALMA (ESO/NAOJ/NRAO), equipo de ALPINE. (Haga click en la imagen para agrandar).

La mayoría de las galaxias se formó cuando el Universo aún era muy joven y tenía apenas unos 200 millones de años de existencia. La nuestra, por ejemplo, probablemente empezó a formarse hace 13.600 millones de años, y hoy nuestro Universo tiene 13.800 millones de años.

Cuando el Universo tenía solo un 10 % de su edad actual (entre 1.000 y 1.500 millones de años después del Big Bang), la mayoría de las galaxias experimentó una especie de “estirón”. En ese momento, las galaxias adquirieron gran parte de su masa estelar y otras propiedades como el contenido de polvo y de elementos pesados y las formas en espiral que vemos en las galaxias más cercanas. De ahí que, para entender cómo se formaron las galaxias como nuestra Vía Láctea, sea tan importante estudiar esa época cósmica.

En el marco de la campaña de observación llamada ALPINE (o ‘Gran Programa de ALMA par Observar C+ en Épocas Remotas’, por su sigla en inglés), un equipo internacional de astrónomos estudió 118 galaxias que se encontraban en pleno “estirón” en el Universo primitivo. “Para nuestra sorpresa, muchas de ellas ya estaban mucho más maduras de lo que esperábamos”, cuenta Andreas Faisst, del Centro de Análisis y Procesamiento Infrarrojo (IPAC, en su sigla en inglés) del Instituto de Tecnología de California (Caltech).

Las galaxias se consideran más maduras que primordiales cuando contienen una cantidad considerable de polvo y elementos pesados. “No esperábamos ver tanto polvo y elementos pesados en estas galaxias distantes”, agrega el científico. El polvo y los elementos pesados (definidos por los astrónomos como elementos más pesados que el hidrógeno y el helio) son considerados subproductos de estrellas moribundas. Pero como las galaxias del Universo primitivo todavía no han tenido tiempo suficiente para producir estrellas, los astrónomos no esperaban que contuvieran grandes cantidades de polvo ni elementos pesados.

“Los estudios realizados anteriormente nos habían mostrado que las galaxias tan jóvenes contienen poco polvo”, explica Daniel Schaerer, de la Universidad de Ginebra (Suiza). “Sin embargo, descubrimos que cerca del 20 % de las galaxias que se formaron durante esta época remota contienen mucho polvo y que una proporción considerable de la luz ultravioleta emitida por las estrellas recién formadas ya es opacada por ese polvo”, agrega.

Muchas de las galaxias observadas también son consideradas relativamente maduras porque presentan estructuras muy diversas, que incluyen las primeras señales de discos giratorios, los cuales, posteriormente, podrían formar estructuras en espiral como la de nuestra Vía Láctea. Por lo general, los astrónomos esperan que las galaxias del Universo primitivo estén maltrechas debido a las frecuentes colisiones a las que se ven sometidas. “Vemos muchas galaxias en proceso de colisión, pero también vemos algunas que giran de forma ordenada, sin presentar señales de colisiones”, afirma John Silverman, del Instituto Kavli de Física y Matemática del Universo, en Japón.

Debido a la expanción del Universo estas galaxias son invisibles a nuestra vista, debido a que su velocidad de alejamiento estira la luz que emiten a frecuencias que nuestros ojos no pueden captar y para estudiarlas los astrónomos deben observarlas en luz infrarroja y a las más lejanas en luz milimétrica de microondas y para ello el observatorio ALMA es el instrumento ideal, ya que es capaz de captar con nitidez la luz de estas galaxias primitivas que ha estado viajando por miles de millones de años.

ALMA ya había observado galaxias muy distantes, como MAMBO-9 (una galaxia con mucho polvo) y el Disco Wolfe (una galaxia con un disco giratorio). No obstante, era difícil determinar si estos hallazgo eran únicos o si había más galaxias similares. ALPINE es la primera campaña que permitió a los astrónomos estudiar una cantidad significativa de galaxias del Universo primitivo, y los resultados obtenidos demuestran que esas galaxias pueden evolucionar más rápido de lo que se creía. Así y todo, los científicos aún o entienden a cabalidad cómo crecieron tan rápido ni por qué algunas ya tienen discos giratorios.

Las observaciones realizadas con ALMA fueron cruciales para esta investigación, puesto que los radiotelescopios pueden observar los procesos de formación de estrellas ocultas por el polvo y determinar el movimiento del gas emanado de zonas incubadoras de estrellas. Para estudiar las galaxias del Universo primitivo se suelen usar telescopios ópticos e infrarrojos, que permiten medir las masas de las estrellas formadas y en formación que no se encuentren opacadas por polvo. Sin embargo, con estas herramientas es más difícil observar zonas oscurecidas por el polvo, donde suelen formarse las estrellas, y medir el movimiento del gas presente en las galaxias. A veces, simplemente no se logra ver galaxia alguna. “Con ALMA descubrimos galaxias distantes cuya existencia desconocíamos. Ni siquiera el telescopio Hubble había podido detectarlas”, comenta Lin Yan, de Caltech.

Para saber más sobre las galaxias distantes, los astrónomos quieren apuntar ALMA hacia galaxias individuales durante más tiempo. “Queremos ver exactamente dónde está el polvo y cómo se desplaza el gas. También queremos comparar las galaxias que contienen mucho polvo con otras situadas a la misma distancia y ver si hay algo especial en sus entornos”, explica Paolo Cassata, de la Universidad de Padua (Italia), quien anteriormente se desempeñaba en la Universidad de Valparaíso (Chile).

ALPINE es la primera campaña de observación de galaxias del Universo primitivo en longitudes de onda múltiples. Para obtener una amplia muestra de galaxias los investigadores recabaron datos de observaciones ópticas (de los telescopios Subaru, VISTA, Hubble, Keck y VLT), infrarrojas (Spitzer) y de radio (ALMA). Estos estudios en longitudes de onda múltiples son necesarios para entender a cabalidad cómo se forman las galaxias. “Solo se pueden llevar a cabo campañas tan grandes y complejas como esta gracias a la colaboración entre distintas entidades de todo el mundo”, comenta Matthieu Béthermin, del Laboratorio de Astrofísica de Marsella (Francia).

Imagen Arriba: Evolución de corrimiento al rojo. Redshift evolution of co-moving star formation rate density (?SFR), obtained by integrating the modified Schechter function that best reproduces the ALPINE total IR LF of the continuum non-target detections (excluding the [C II] emitters): black circles. The error bars and the red boxes around our data points show the 1s uncertainty range derived through the MCMC analysis of the LF. The SFRD estimates from ALPINE (legend in the top-right corner of the plot) are also shown for comparison: the blue box with blue open square represents the result obtained from the [C II] LF of the serendipitous line emitters by Loiacono et al. (2020), while the yellow filled hexagons with error bars are the values obtained by Khusanova et al. (2020) from the UV+IR emission of the ALPINE targets. For comparison, estimates from other surveys (UV: Schiminovich et al. 2005; Dahlen et al. 2007; Reddy & Steidel 2009; Cucciati et al. 2012; Schenker et al. 2013; Bouwens et al. 2015; Oesch et al. 2018; optical/near-IR: Driver et al. 2018; Merlin et al. 2019; far-IR: Sanders et al. 2003; Takeuchi et al. 2003; Magnelli et al. 2011, 2013; Gruppioni et al. 2013, 2015; Rowan-Robinson et al. 2016; mm: Dunlop et al. 2017; radio: Novak et al. 2017; gamma-ray bursts: Kistler et al. 2009) are also shown (grey shaded areas and open or filled symbols), as described in the legend at the bottom of the plot. The models by Madau & Dickinson (2014) and Béthermin et al. (2017) are shown as black dashed and orange dot-dashed curves, respectively, while the prediction of the IllustrisTNG simulation (Pillepich et al. 2018) is shown as a dark green solid curve. Also shown are the measurements derived from the cross-correlation between the lensing map of the CMB and the CIB (light blue crosses with error bars, Planck Collaboration et al. 2014) and the prediction by Lagache (2018) obtained by modelling the CIB (violet triple-dot-dashed curves, showing the pessimistic and optimistic cases).


Con el Blanco de Tololo:

RETRATO DE MISTERIOSA GALAXIA CERCANA

CTIO fotografía la galaxia irregular de Formación Estelar IC 10 en gran detalle.

(19 Junio, 2020 - CTIO/CA) Esta espectacular imagen de la galaxia irregular IC 10, una desordenada galaxia cercana a nuestra Vía Láctea, fue tomada desde Cerro Tololo (CTIO) por el National Optical-Infrared Astronomy Research Laboratory (NOIRLab) de NSF y el Observatorio AURA.

Además de una población de estrellas jóvenes y brillantes, esta galaxia irregular alberga exóticas estrellas Wolf-Rayet y un agujero negro. IC 10 se encuentra a unos 2 millones de años luz de la Tierra en la dirección de la constelación de Cassiopeia. Aunque esta distancia parece enorme, sitúa a IC 10 en la vecindad del Grupo Local de galaxias.

Imagen: CTIO fotografía la galaxia irregular de Formación Estelar IC 10. Crédito: CTIO / NOIRLab / NSF / AURA (Haga click en la imagen para agrandar).

Esta imagen muestra los desordenados y llamativos remolinos de gas y estrellas que forman la galaxia irregular IC 10 [1]. Como su nombre lo indica, IC 10 carece de la regularidad de su vecindario galáctico del Grupo Local, lo que hace que las galaxias espirales majestuosas como Andrómeda y la Vía Láctea sean tan llamativas. En cambio, las galaxias irregulares como IC 10 tienen una apariencia más caótica, como se puede ver en los desordenados zarcillos rojos de estrellas y polvo en esta imagen.

IC 10 se encuentra a unos 2 millones de años luz de la Tierra en la dirección de la constelación de Casiopea. Aunque esta distancia es inimaginablemente grande, la verdad es que IC 10 se encuentra en el Grupo Local de galaxias [2]. La galaxia no sólo está relativamente cerca, sino que también se está acercando a la Vía Láctea con una velocidad de unos 1,3 millones de kilómetros por hora, casi 500 veces más rápido que una bala de rifle. A pesar de esta carrera precipitada, el curso acelerado de IC 10 hacia la Vía Láctea no es motivo de preocupación, ya que la pequeña galaxia irregular es un satélite de nuestra vecina Andrómeda.

Además de su proximidad y velocidad vertiginosa, IC 10 es la única galaxia en el grupo local que tiene la distinción de ser una galaxia de formación estelar. Como su nombre lo indica, este tipo de galaxias experimentan un fuerte estallido de formación estelar y están repletas de estrellas jóvenes incandescentes, formadas cuando gigantescas nubes de gas frío de hidrógeno se condensan y alcanzan las presiones necesarias para encender la fusión nuclear. La luminosidad de estas estrellas recién formadas es lo que hace que los zarcillos brillantes en esta imagen sean tan llamativos.

Aparte de la gran cantidad de estrellas jóvenes y de sus vastas nubes de hidrógeno, IC 10 alberga otros objetos astronómicos más exóticos. La galaxia tiene una gran cantidad de estrellas Wolf-Rayet, una clase rara de estrellas con temperaturas superficiales extremadamente altas. Las superficies de estas estrellas pueden alcanzar 200.000 grados Kelvin — 30 veces más altas que nuestro Sol. Además de estas ardientes estrellas, IC 10 aloja un agujero negro más pequeño que el monstruo supermasivo que se encuentra en el corazón de nuestra Vía Láctea, que fue formado por la muerte de una estrella masiva [3]. Curiosamente, nuestra visión del agujero negro de IC 10 es interrumpida ocasionalmente. De la misma forma que la Luna bloquea la luz del Sol durante un eclipse, una estrella Wolf-Rayet bloquea de forma intermitente la radiación de rayos X del agujero negro [4].Lo más probable es que IC10 haya pasado por una colisión con otra galaxia en el Grupo Local hace unos 10 millones de años.

A pesar de su colección de fascinantes objetos astronómicos y su proximidad, IC 10 ha sido difícil de estudiar desde que fuera descubierta hacia fines del siglo XIX. Este problema ocurre por la ubicación irregular de la galaxia, que yace casi al borde de la Vía Láctea, lo que implica que cualquier observación debe atravesar la gruesa banda de polvo y de estrellas que forma nuestra galaxia. Estas estrellas se pueden ver en el primer plano de la imagen como puntos brillantes rodeados de pináculos de difracción. Si bien estos intrusos estelares pueden frustrar a los astrónomos, forman un marco atractivo para este sorprendente retrato de una galaxia irregular.

Al respecto, el Director del Observatorio AURA en Chile, Dr. Mario Hamuy, comentó que “la ventaja que ofrece la instrumentación con la que cuentan los telescopios de AURA en Chile, y el profesionalismo del personal encargado de su mantención y operación, permite a los científicos poner sus ojos en objetos que de otro modo serían invisibles para nosotros. Eso nos permite realizar colaboraciones cruciales en el avance del conocimiento científico”.

La imagen fue obtenida por astrónomos en Cerro Tololo (CTIO por sus siglas en inglés), un programa de NOIRLab de NSF y Observatorio AURA. Tololo se encuentra en las montañas del Norte de Chile a una altitud de 2.200 metros (7.200 pies), y permite a investigadores de los Estados Unidos y el mundo acceder al cielo del hemisferio Sur.

Notas:
[1]:
El nombre de IC 10, como muchos objetos astronómicos, proviene del catálogo en el que se describió por primera vez. Los objetos con el identificador IC se registraron en el Catálogo de Índices de nebulosas y cúmulos de estrellas, una extensa lista de cúmulos estelares, nebulosas y galaxias descubiertas entre 1888 y 1907. La gran cantidad de objetos en el cielo nocturno impide que galaxias tan llamativas como IC 10, tengan un nombre pegadizo y fácil de recordar.
[2]: La estrella compañera del agujero negro de IC 10 es tanto la fuente de estos rayos X como su obstrucción ocasional. El material despojado de la superficie de la estrella Wolf-Rayet gira en espiral sobre el agujero negro, donde alcanza temperaturas extremadamente altas e irradia energía hacia el exterior en forma de rayos X. A medida que la estrella en órbita pasa entre el agujero negro y la Tierra, la radiación de rayos X se interrumpe temporalmente.
[3]: El agujero negro supermasivo en el centro de la Vía Láctea tiene una masa de aproximadamente 4 millones de soles. El agujero negro en IC 10 tiene una masa de aproximadamente 30 soles.
[4]: La estrella compañera del agujero negro de IC 10 es tanto la fuente de estos rayos X como su obstrucción ocasional. El material despojado de la superficie de la estrella Wolf-Rayet gira en espiral sobre el agujero negro, donde alcanza temperaturas extremadamente altas e irradia energía hacia el exterior como rayos X. A medida que la estrella en órbita pasa entre el agujero negro y la Tierra, esta corriente de radiación de rayos X se interrumpe temporalmente.


Con el VLT:

RÁFAGA DE RADIO ILUMINA HALO GALÁCTICO

Utilizando el Very Large Telescope de ESO, un equipo de astrónomos ha observado, por primera vez, cómo una ráfaga rápida de radio ha atravesado un halo galáctico sin apenas encontrar obstáculos, lo que sugiere que el halo tiene una densidad sorprendentemente baja y un campo magnético débil. Esta nueva técnica podría ser utilizada para explorar los enigmáticos halos galácticos.

(26 Sept. 2019 - ESO/CA) Utilizando un misterio cósmico para sondear otro misterio, los astrónomos analizaron una ráfaga rápida de radio para estudiar el gas difuso del halo de una galaxia masiva [1]. En noviembre de 2018, el radiotelescopio ASKAP (Australian Square Kilometre Array Pathfinder) captó una ráfaga rápida de radio llamada FRB 181112 (Fast Radio Burst). Las observaciones de seguimiento llevadas a cabo con el Very Large Telescope (VLT) de ESO, ubicado en Chile, y otros telescopios revelaron que los pulsos de radio, en su camino hacia la Tierra, atravesaron el halo de una galaxia masiva. Este hallazgo permitió a los astrónomos analizar la señal de radio en busca de pistas sobre la naturaleza del gas del halo de esa galaxia.

Imagen: La señal de FRB 181112 estaba compuesta por unos pocos pulsos, cada uno con una duración inferior a 40 microsegundos (10.000 veces más corto que el parpadeo de un ojo). La corta duración de los pulsos pone un límite superior a la densidad del gas del halo porque el paso a través de un medio más denso ampliaría la duración de la señal de radio. Crédito: ESO/M. Kornmesser (Haga click en la imagen para agrandar).

"La señal de la ráfaga rápida de radio expuso la naturaleza del campo magnético que hay alrededor de la galaxia y la estructura del gas del halo. El estudio pone a prueba una nueva y prometedora técnica para explorar la naturaleza de los halos de las galaxias", afirmó J. Xavier Prochaska, profesor de astronomía y astrofísica en la Universidad de California Santa Cruz y autor principal de un artículo que presenta estos nuevos hallazgos y que se publica hoy en la revista Science.

Los astrónomos todavía no saben qué causa las ráfagas rápidas de radio, aunque, recientemente, han sido capaces de rastrear algunas de estas señales de radio, muy cortas y brillantes, hasta las galaxias en las que se originaron. "Cuando superpusimos las imágenes de radio y las ópticas, pudimos ver de inmediato que la rápida explosión de radio atravesó el halo de esta galaxia, que coincide en primer plano y, por primera vez, tuvimos una forma directa de investigar la materia que rodea a esta galaxia y que, de otro modo, sería invisible para nosotros", dijo cherie Day, estudiante de doctorado en la Universidad Tecnológica de Swinburne (Australia).

Un halo galáctico contiene materia oscura y ordinaria (o bariónica), que principalmente se encuentra en forma de gas caliente ionizado. Mientras que la parte luminosa de una galaxia masiva podría tener alrededor de 30.000 años luz de ancho, su halo (de una forma más o menos esférica) es diez veces más grande en diámetro. El gas del halo alimenta la formación estelar a medida que cae hacia el centro de la galaxia, mientras que otros procesos, como las explosiones de supernovas, pueden expulsar material fuera de las regiones en las que se forman estrellas, enviándolo hacia el halo galáctico. Una de las razones por las que los astrónomos quieren estudiar el gas del halo es para entender mejor estos procesos de eyección que pueden paralizar la formación de estrellas.

Según Prochaska, "El halo de esta galaxia es sorprendentemente tranquilo. La señal de radio apenas había sufrido perturbaciones a su paso por la galaxia, lo cual contrasta con lo que los modelos anteriores predicen que habría sucedido a la ráfaga".

La señal de FRB 181112 estaba compuesta por unos pocos pulsos, cada uno con una duración inferior a 40 microsegundos (10.000 veces más corto que el parpadeo de un ojo). La corta duración de los pulsos pone un límite superior a la densidad del gas del halo porque el paso a través de un medio más denso ampliaría la duración de la señal de radio. Los investigadores calcularon que la densidad del gas del halo debe ser inferior a 0,1 átomos por centímetro cúbico (equivalente a varios cientos de átomos en un volumen del tamaño de un globo) [2].

"Al igual que el aire cálido de un día de verano, la tenue atmósfera de esta galaxia masiva debería deformar la señal de la ráfaga rápida de radio. En cambio, recibimos un pulso tan prístino y preciso que no hay absolutamente ninguna firma de este gas", aseveró Jean-Pierre Macquart, coautor del trabajo y astrónomo en el Centro Internacional de Investigación en Radioastronomía de la Universidad de Curtin (Australia).

El estudio no encontró evidencias de la presencia de nubes turbulentas frías o de pequeños cúmulos densos de gas frío en el halo. La señal de ráfaga rápida de radio también proporcionó información sobre el campo magnético en el halo, que es muy débil (mil millones de veces más débil que el de un imán de nevera).

Llegados a este punto, con los resultados de un solo halo galáctico, los investigadores no pueden decir si la baja densidad y la baja fuerza del campo magnético medidas son inusuales o si los estudios previos sobre halos galácticos han sobreestimado estas propiedades. Prochaska afirmó que espera que ASKAP y otros radiotelescopios utilicen ráfagas rápidas de radio para estudiar muchos más halos galácticos y resolver sus propiedades.

"Esta galaxia puede ser especial", dijo. "Necesitaremos usar las ráfagas de radio rápidas para estudiar decenas o cientos de galaxias de un rango variado de masas y edades para evaluar a toda la población". Telescopios ópticos como el VLT de ESO juegan un papel importante al revelar cuán lejos está la galaxia que alojó cada ráfaga, así como si la ráfaga habría pasado a través del halo de cualquier galaxia situada en un primer plano.

Notas:
[1]: Un vasto halo de gas de baja densidad se extiende mucho más allá de la parte luminosa de la galaxia en la que se concentran las estrellas. Aunque este gas caliente y difuso constituye más masa para una galaxia que las propias estrellas, es muy difícil de estudiar.

[2]: Las restricciones de densidad también limitan la posible presencia de turbulencias o de nubes de gas frío dentro del halo. Aquí la palabra “frío” es un término relativo, refiriéndose a temperaturas de alrededor de 10.000°C, frente al gas caliente del halo, que está a un millón de grados.

Artículo Científico.


Colaboración EHT:

PRIMERA IMAGEN DE LA SOMBRA DE UN AGUJERO NEGRO

Ocho grandes radiotelescopios se unen para realizar la primera imagen de la sombra de un agujero negro galáctico supermasivo en la galaxia M87.

(10 Abril 2019 - ALMA/CA) Gran expectación crearon los astrónomos frente al lanzamiento de la primera imagen de un agujero negro obtenida a través de ocho grandes radiotelescopios repartidos por el mundo en la colaboración Event Horizon Telescope. Fue presentada en seis conferencias de prensa en diversas capitales de todos los continentes, encabezadas por los directores de las organizaciones científicas que forman parte de la colaboración Event Horizon Telescope que realizó la proeza astronómica.

Imagen: La sombra del agujero negro se recorta contra el brillo del disco de acreción que lo rodea y que brilla en luz milimétrica que pueden captar los radiotelescopios. Esta luz es invisible al ojo humano y para esta ilustración se le ha asignado un color visible. El borde del círculo central es el llamado horizonte de eventos de el cual la colaboración EHT toma su nombre. Crédito: ESO. (Haga click en la imagen para agrandar).

Finalmente, a las 09:07 horas, de Chile, la imagen se hizo pública. Si esperaba algo muy especial, se equivocó, la imagen muestra una donat naranja con un borde más amarillo que el otro, rodeando una zona más oscura. Todo medio difuso y desenfocado. Parece que los astrónomos se impresionan con poco.

Pero esa imagen merece en realidad todo el aplauso y la admiración de científicos y legos, un agujero negro es un objeto que está en el límite de nuestra comprensión, se trata de un objeto extremadamente masivo y de un tamaño muy pequeño, que la física apenas puede comprender, un objeto completamente oscuro del cual la luz no puede escapary haber obtenido una imagen de este es una proeza gigantesca.

Imagen: En Santiago de Chile, la conferencia de prensa se realizó en el edificio de ALMA, en la comuna de Vitacura, donde intervinieron el director de ALMA, Sean Dougherty y el director general de la ESO, Xavier Barcons (aplaudiendo), intervinieron en Santiago, los astrónomos Goeffrey Crew y Violette Impellizzeri, además de Valeria Foncea, Directora de Comunicaciones y Educación del Observatorio ALMA. Entre el público se encontraba el Ministro de Ciencia de Chile, Andrés Couve Correa.

“Estamos dando a la Humanidad la primera imagen de un agujero negro; es una puerta de salida de nuestro Universo”, manifestó Sheperd S. Doeleman, del Centro de Astrofísica Harvard & Smithsonian y director de proyecto del EHT desde Estados Unidos. “Este es un hito en astronomía, una proeza científica sin precedentes lograda por un equipo de más de 200 investigadores”.

El límite del agujero negro, es aproximadamente 2,5 veces más pequeño que la sombra que proyecta y mide casi 40 mil millones de kilómetros de ancho. Si bien esto puede sonar grande, este anillo se ve desde la Tierra con sólo unos 40 microarcsegundos, lo que equivale a medir la longitud de una tarjeta de crédito en la superficie de la Luna.

"Si está inmerso en una región luminosa, como un disco de gas brillante, se espera que el agujero negro produzca una zona oscura similar a una sombra, algo que había sido predicho por la relatividad general de Einstein y que nunca habíamos visto antes”, explica Heino Falcke, de la Universidad Radboud (Países Bajos), quien se desempeña como director del Consejo Científico del EHT. “Esta sombra, causada por la curvatura gravitacional y la captura de luz por el horizonte de eventos, revela mucho acerca de la naturaleza de estos objetos fascinantes, y nos permitió medir la enorme masa del agujero negro de M87”.

Imagen: La galaxia elíptica M87 en Virgo con su chorro activo que nace en el agujero negro M87*, la imagen del EHT es una mil millonésima parte de esta imagen. Crédito: HST/NASA.(Haga click en la imagen para agrandar).

Para resolver las sombras de los agujeros negros que yacen en los núcleos de la galaxia M87 (M87* en adelante) y de la Vía Láctea (Sagitario A* en adelante), los dos agujeros negros supermasivos con los tamaños angulares aparentes más grandes que se ha propuesto observar la colaboración EHT, en una longitud de onda de observación de 1,3 mm (230 GHz) se requiere de líneas de base (la distancia entre los telescopios) de escala del diámetro terrestre. La luz de los alrededores de loa agujeros negros que reciben los radiotelescopios es invisible al ojo humano y para poder ver las imágenes se le ha asignado artificialmente un color visible.

Las observaciones del EHT usan una técnica conocida como interferometría de línea de base muy larga (VLBI, en su sigla en inglés), que sincroniza telescopios de todo el mundo y aprovecha la rotación de nuestro planeta para crear un gran telescopio del tamaño de la Tierra que observa a una longitud de onda de 1,3 mm. Esta técnica permite al EHT alcanzar una resolución angular de 20 microarcosegundos, suficiente para leer un periódico en Nueva York desde un café en París.

"Gracias a Chile por abrir sus cielos" manifestó el director de ALMA, Sean Dougherty al cerrar su intervención.

Esta investigación se presentó en una serie de seis artículos publicados hoy en un número especial de The Astrophysical Journal Letters.

La colaboración de EHT involucra a más de 200 investigadores de África, Asia, Europa, América del Norte y del Sur. Esta alianza internacional está trabajando para capturar las más detalladas imágenes de agujeros negros posibles, creando un telescopio virtual del tamaño de la Tierra. Respaldado por una considerable inversión internacional, el EHT conecta los telescopios existentes utilizando un innovador sistema que permite crear un instrumento fundamentalmente nuevo con el mayor poder de resolución angular que se haya logrado hasta ahora.

Los telescopios individuales involucrados son: ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array) y APEX en Chile, el Telescopio IRAM de 30 metros, el Observatorio IRAM NOEMA, el Telescopio James Clerk Maxwell (JCMT), el Telescopio Milimétrico Grande Alfonso Serrano (LMT), el Conjunto de Submilimétrico (SMA), el Telescopio de Submilimétrico (SMT), el Telescopio del Polo Sur (SPT), el Telescopio Kitt Peak y el Telescopio de Groenlandia (GLT).

Artículo científico.

Zooming en el corazón de Messier 87.

https://www.youtube.com/watch?v=S4JLkHFoJgo
La conferencia de prensa en el edificio de ALMA en Santiago, ver hasta el final.



Con el VLT:

NGC3981: UNA JOYA EN EL CIELO
El instrumento FORS2 del VLT, en Chile, captó esta impresionante imagen de la galaxia espiral NGC 3981 y sus alrededores.

(28 Junio 2018 - ESO/CA) Científicos del Observatorio VLT de Cerro Paranal en Chile, han utilizado la cámara CCD del instrumento FORS2, instalado en la Unidad 1 (Antu) del Very Large Telescope para fotografiar la vecina galaxia espiral NGC 3981 [1] en todo su esplendor.

Normalmente los astrónomos del VLT están muy ocupados cumpliendo los programas de investigación científica que se les asignan como para utilizar estos caros y magníficos instrumentos tomando fotos bonitas sólo por placer. Pero contentar al público es también una de las tareas de este observatorio, finalmente son los ciudadanos comunes quienes financian sus actividades, por lo que cuando las condiciones de observación no son adecuadas para recabar datos científicos en lugar de permanecer inactivos aprovechan los telescopios para captar imágenes como esta, como parte del programa Joyas Cósmicas de ESO que utiliza los telescopios de ESO para captar impresionantes imágenes de los cielos del sur.

Imagen: FORS2, un instrumento instalado en el VLT (Very Large Telescope) de ESO, ha observado la galaxia espiral NGC 3981, haga click para agrandarla y ver decenas de galaxias más lejanas. Crédito: ESO. (Haga click en la imagen para agrandar).

Esta maravillosa imagen muestra la resplandeciente galaxia espiral NGC 3981 suspendida en la negrura del espacio. Esta galaxia, que se encuentra en la constelación de Crater (El Tazón de Baco), fue fotografiada en mayo de 2018 con FORS2 (FOcal Reducer and low dispersion Spectrograph 2, reductor focal y espectrógrafo de baja dispersión 2), instalado en el VLT (Very Large Telescope) de ESO.

Entre la batería de instrumentos de vanguardia montados en las cuatro unidades de telescopio del VLT, FORS2 destaca por su extrema versatilidad. Igual que una "navaja suiza", este instrumento (además de ser capaz de producir hermosas imágenes como esta) es capaz de estudiar una gran variedad de objetos astronómicos de muy diversas maneras.

La extrema sensibilidad de la cámara de FORS2 reveló brazos espirales de NGC 3981, cargados de polvo en forma de vastas corrientes y de regiones de formación estelar, y un disco prominente de jóvenes estrellas calientes. La galaxia está inclinada hacia la Tierra, permitiendo a los astrónomos observar justo en el corazón de esta galaxia y estudiar su centro luminoso, una región altamente energética que contiene un agujero negro supermasivo. También se muestran estructuras espirales periféricas de NGC 3981, algunas de las cuales parecen haber sido estirada hacia el exterior de la galaxia, probablemente debido a la influencia gravitatoria de un pasado encuentro galáctico.

NGC 3981 [2] tiene muchos vecinos galácticos. Aproximadamente a unos 80 millones de años luz de la Tierra, la galaxia es parte del Grupo NGC 4038, entre Corvus y Cráter, cúmulo de galaxias que también contiene a las conocidas Galaxias Antena, que son galaxias en interacción. Este grupo es un componente más pequeño del Supercúmulo de Virgo, la gigantesca agrupación de galaxias que alberga nuestra propia galaxia Vía Láctea.

NGC 3981 no es el único objeto interesante de esta imagen. Además de varias estrellas en primer plano de nuestra galaxia, la Vía Láctea, FORS2 también captó un asteroide solitario atravesando el cielo: se trata de la débil línea que puede verse hacia la parte superior de la imagen. Este asteroide, sin quererlo, ha ilustrado el proceso utilizado para crear imágenes astronómicas, con las tres exposiciones diferentes de la ruta del asteroide que componen esta imagen, que se muestra en las secciones del azul, el verde y el rojo.

En caso de que los datos obtenidos puedan ser útiles para futuras aplicaciones científicas, estas observaciones se conservan y se ponen a disposición de los astrónomos a través de los archivos científicos de ESO.

Notas:
[1]: Fue descubierta en 1785 por William Herschel.

[2]: Corrimiento al rojo de z = 0,005827 equivalente a una distancia de unos 80 millones de años luz. Catálogo SIMBAD.

Posición de la galaxia NGC 3981 en el cielo de la Tierra: AR: 11h 56m 07.445s, Dec.: -19° 53' 46.24? (J2000 equinox), constelación de Crater, "La copa de Baco". Tiene magnitud aparente de +11,75.


Ir al Inicio de la página




BUSCADOR DEL SITIO:

Búsqueda personalizada


Meade en Chile.


Más noticias de astrofísica galáctica:

INDICE GALAXIAS

GALAXIAS VIII

GALAXIAS VII

GALAXIAS VI

GALAXIAS V

GALAXIAS IV

GALAXIAS III

GALAXIAS II

GALAXIAS IA

GALAXIAS I


Curso de Astronomía Básica

EXCURSIONES ASTRONÓMICAS
AL DESIERTO DE ATACAMA


1 2 3 4 5 6